jueves, 19 de enero de 2012

Quejas


Las mujeres hemos aprendido a quejarnos, nos quejamos por todo, a veces dejamos de hacerlo, pero nos tragamos toda la queja y la guardamos en lo mas profundo de nuestro ser, hasta que se vuelve incontrolable.
Las quejas no son mas que historias, existen las narradoras de historias, y también las eternas amigas que son las que escuchan absolutamente todo, no importa si es por chat, mensajes al celular, llamada telefónica o con un café de por medio. Tiene sus lados buenos y malos, depende del día, situación, persona, y sobre todo ... de la historia.

Historias, son las que día a día escucho y leo, son mas y mas mujeres que escucho vivir quejándose por todo lo que las rodea. Admitamoslo, la vida es difícil, mas aun si eres mujer, porque? SIMPLE: las mujeres tenemos el "don" de prestar atención a varias cosas a la vez, y ESO se convierte en estrés. Los caballeros contrariamente, prestan toda su atención a una y solo una cosa a la vez, así que, si realmente no te escucha cuando esta embobado en la tele o la computadora, no es su culpa.... es un defecto genético.

Las quejas mas trilladas de la década:

La soltera: no encuentra a su pareja ideal...
La casada: que patán al que tiene por marido...
La madre: que sacrificada es su vida...
La divorciada: libre del patán! ... pero en busca de otro...
La ama de casa: que pesado trabajo...
La oficinista (empleada): que bruj@ es el/la jef@!!!!
La oficinista (jefa): que inútiles empleados!... y no me duran las relaciones...
La gorda: que gorda... (lo que deriva en muchas otras quejas)
La flaca: no entiende porque se ve como un alambre con pelos...
La de pelo rizado: vive planchandose el pelo...
La de pelo lacio: se lo riza...

uffff..... en fin....

Hay temas de fondo, temas de forma, temas de temas y temas que no tienen NINGÚN tema.

Somos mujeres de tiempo completo, SI, hacemos de todo, y cuando nos convertimos en madres, nos elevamos a la n-sima potenica (chiste nerd).
Lo importante:  La mente atenta para actuar y alma dispuesta a aprender.

Y si algo aprendi, en esta "corta" etapa es a quejarme menos y vivir mas.

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